FRUITS DE PONENT defiende ante el Tribunal General de la Unión Europea los intereses de sus socios cooperativistas por las pérdidas ocasionadas por el llamado «veto ruso» y la bajada de precios durante la campaña de 2014
Vista ante el Tribunal en Luxemburgo en el que el Grupo Cooperativo demanda a la Comisión Europea por la ineficiente y tardía reacción de las medidas adoptadas para hacer frente a la crisis del sector
Martes 20 de febrero de 2018 el Tribunal General de Justicia de la Unión Europea, en Luxemburgo, celebró la vista correspondiente al recurso interpuesto por Fruits de Ponent Grupo Cooperativo contra la Comisión Europea por las medidas que ésta adoptó en agosto de 2014 para hacer frente a las perturbaciones del mercado de la fruta de hueso (bajada de precios y cierre de frontera para exportar a Rusia «veto ruso»).
La defensa del Grupo Cooperativo, ejercida por el equipo del despacho Roca-Junyent y encabezado por el mismo Sr. Miquel Roca Junyent, solicita al Tribunal General que condene a la Comisión Europea a reparar las consecuencias negativas que afectaron a socios cooperativistas (se han presentado unos casos concretos que sirven de base a la demanda) con la consecuente pérdida económica durante la campaña de 2014, ya que, entiende, que la Comisión no actuó de manera diligente y efectiva.
En el recurso interpuesto, el Grupo Cooperativo alega que la Comisión Europea, en agosto de 2014, fue «actuar tardíamente» a la hora de hacer frente a las graves perturbaciones del mercado. Además, utilizó mecanismos de corrección que meses antes la misma Comisión había reconocido eran inadecuados e ineficaces. Asimismo, no adoptó las medidas pertinentes (no recogió información de los mercados, las medidas de retirada no fueron las correctas para hacer frente a la crisis generada) y, mediante sus acciones y omisiones, la Comisión, cometió una violación de las normas que tienen por objeto conferir derechos a los particulares, como son: el principio del deber de diligencia, los principios de asistencia y protección, el principio de buena administración y, en última instancia, el principio de interdicción de la arbitrariedad, o sea, que las acciones que activó fueron arbitrarias y no en defensa de los intereses de todo el sector.
Con esta demanda, Fruits de Ponent pretende también -además de defender los intereses y derechos de sus socios productores- poner de relieve a instancias europeas la grave crisis que afecta al sector desde la campaña de 2014 y que ha supuesto pérdidas millonarias, a Además de la desaparición de muchas explotaciones agrícolas.
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